
Pero como a nosotros lo que realmente nos interesa es ir descubriendo esos escondidos tesoros chinos que en su 99 por ciento jamás veremos estrenados en nuestras salas, os contamos que la producción china que más fuerte está pegando en estos momentos es la cinta de animación en 3D dirigida por Sun Lijun, Legend of a Rabbit (Tu Xia Chuan Qi, 2011). Esta cinta de kung fu que vendría a ser la respuesta autóctona a Kung Fu Panda 2, de la que parece haber heredado más de una coincidencia argumental (y sino, sólo hay que echarle un vistazo al trailer), nos explica la historia de un conejo que trabaja de cocinero en una granja, que promete a su maestro de artes marciales en su lecho de muerte que buscará a su hija y cuidará de ella. Incapaz de encontrarla malvive como cocinero en una academia militar, hasta que una serie de acontecimientos harán que deba replantearse su vida. El diseño del conejo protagonista está inspirado en el Dios Conejo, un símbolo del viejo Beijing que generalmente cobra importancia antes de la Fiesta del Medio Otoño. Cada año, a mediados de Agosto cuando la luna está llena, es tradición comprar esculturas de barro de este Dios, especialmente para los niños, con el fin de orar por la paz y la buena salud. La película contó con el trabajo de más de 500 animadores y tardó tres años en estar completamente preparada para su estreno.

Por último, tres títulos más que se han hecho hueco en nuestro top, aunque con una recaudación un tanto exigua, ya que se trata de trabajos menos comerciales: The Devil Inside Me (Duo Ming Xin Tiao, 2011), thriller protagonizado por Tony Leung Ka Fai (Bruce Lee, My Brother, 2010), quien da vida a un violento médico con problemas en sus relaciones personales; el melodrama romántico Rest on your Shoulder (Jian Shang Die, 2011), film que compitió por el Golden Globet Awards en el pasado Festival de Cine de Shangai, y la recién llegada a la cartelera The Story of David, una alocada comedia dirigida por Chen Yu e interpretada por el cómico Huang Bo (The Legend of Chen Zhen, 2010) y Sophia Guo (Promise Time, 2011).
Por nuestro colaborador Francisco Nieto