
Dados los precedentes de otras grandes producciones sobre la Guerra de Corea (como Silmido o Brotherhood of War), se espera que The Front Line se convierta en uno de los éxitos del año, ayudando a confirmar la recuperación (en números) de la industria coreana. Desde luego, ya ha empezado con buen pie, al menos en lo que a proyección internacional se refiere, pues se ha vendido a Inglaterra, Tailandia y Alemania. Buenos augurios de cara a un desembarco también en España (al menos en formato doméstico).
Jordi Codó