Nuestro periplo festivalero por Donosti tiene una meta y es, cómo no, visionar y reportar a nuestros lectores cuanto más cine asiático sea posible encontrar en la intrincada parrilla del certamen. Pero también es cierto que, en un festival como el de San Sebastián de obligada andadura para todos aquellos que tengan en España aunque sea una mínima conexión con la industria del cine, es obvio que el reencontrarse con conocidos y amigos es inevitable, así como acudir a los distintos actos y presentaciones como a los que asistimos ayer en nuestro primer y accidentado día (que pasó por perder el avión a primera hora de la mañana, o sea, las 06:00h y tener que improvisar sobre la marcha): la presentación de la plataforma digital Feelmakers (una nueva propuesta de VOD alternativa a Filmin con contenidos que van desde cortometrajes, animación y documentales) y, cómo no, sabiendo nuestro vínculo especial de amistad con las tierras extremeñas, al encuentro «Extremadura: cine en acción« que fue clarificadora en cuanto a las posibilidades de la comunidad a nivel cinematográfico, además de todo un festín para el paladar pues se pudo degustar del famoso jamón y lomo ibéricos de la zona… Vamos, que ya cenamos prácticamente.
Entrando ya en materia cinematográfica, estos son nuestros objetivos para estos 5 días en San Sebastián:
1- En el nº uno de nuestras prioridades está, por encima de todo, acudir al pase y rueda de prensa de la coreana Haemoo (Sea Fog) que tendrá lugar mañana lunes 22 por la tarde. Allí estaremos para escuchar a Shim Sung-bo, el guionista del film de culto ya Memories of Murder (Crónica de un asesino en serie) de Bong Joon-ho, que dirige aquí su primer film.
2- Ante la imposibilidad de poder ver The Tale of Princess Kaguya (su proyección tiene lugar cuando nosotros ya hemos abandonado tierras donostiarras), se nos hace absolutamente imprescindible acudir a alguno de los pases en la sección «Zabaltegi» del documental The Kingdom of Dreams and Madness que se interna y retrata desde dentro al mismísimo estudio Ghibli con entrevistas a sus fundadores. Después de lo vivido estos días por los miembros de CineAsia en Martorell, os podéis imaginar qué ganas hay de verlo.
3- Seguirle los pasos y opiniones de críticos y público (o sea, hacer de alcahuetes), y ver cómo le va a Black Coal, Thin Ice. La ganadora de Berlín se proyectó ya ayer en un primer pase y las reacciones son contradictorias. Quizá, con el Oso de Oro en su haber, las expectativas han jugado una mala pasada a la película, y mucha gente salía diciendo: «esparaba más«. Pero es que no hay más, y nunca ha pretendido ser más. Black Coal (que se estrena con este título en España la semana que viene) es un ejercicio de cine de autor de género. Un thriller que juega con el humor negro y con la ironía y que, a pesar de ser un film totalmente noir, profundiza en lo que siempre a hecho su director, en la soledad y la alienación del ser humano. Muy digno. De notable alto.
4- Otra imprescindible de la sección «Perlas» del Festival: Still the Water de Naomi Kawase con parte de producción española (Luis Miñarro está detrás). Mañana tendremos cita con esta historia de adolescentes descubriendo repentinamente y a la fuerza la madurez y la vida adulta.
5- Descubrir las que, a priori y por lo que hemos podido leer, parecen dos joyitas. En «Nuevos Directores» veremos si nos cuadra poder ver In Her Place, coproducción entre Corea del Sur y Canadá de mano del debutante Albert Shin. Y en «Zabaltegi» de nuevo, My Man de Kazuyoshi Kumakiri con Tadanobu Asano como protagonista. Esta última caerá esta misma tarde, así que os contaremos pronto.
6- Darnos el placer de «degustar» algunos de los platos asiáticos que nos depara la sección «Culinary Cinema»: de Singapur nos llega Recipe de Eric Khoo (a quien muchos recordarán por la extraña y fascinante a la vez Tatsumi de 2011); y de Japón veremos Little Forest: Summer/Autumn de Junichi Mori.
7- Otros títulos que se cuelen en la parrilla y que por horarios nos cubran los huecos donde lo asiático no esté: y como no podía ser de otra manera y por nuestros vínculos «personales» con Antonio Banderas, la primera ha sido esta mañana Autómata: ¡¡¡otra peli de ciencia-ficción española!!! Qué queréis que os diga, sólo por eso me merece todo el respeto del mundo, como en su día me lo mereció Eva… Bravo Gave Ibáñez, una muy, pero que muy digna incursión en el fantástico.
Una crónica de Gloria Fernández