Director: Farhan Akhtar País: India Año: 2011 Con: Shah Rukh Khan, Priyanka Chopra, Hrithik Roshan, Florian Lukas, Boman Irani, Om Puri Género: Thriller / Acción Dur: 148 min.
«I am the King!» decía Don al final de la primera parte de la saga; pues bien, «The King is back». Y es que Shah Rukh Khan volvió a dominar las taquillas en la India estas navidades con esta Don 2, la esperada secuela del exitoso remake dirigido por Farhan Akthar. Si la primera parte seguía la estela de engaños y traiciones, esta segunda es un film de acción más convencional con el antihéroe chulesco, descarado y arrogante, que parece tener controladas todas las situaciones a base de adrenalina y desenfreno, siguiendo constantemente el lema que dice que «quien se arriesga gana».
Después de un inicio espectacular, en el que vemos cómo los hombres que dominan el submundo del hampa se unen para acabar con Don, éste sorprende a todos entregándose a la Interpol en Malasia, a la agente Roma. Don ingresa entonces en prisión, donde le espera Vardhan preparado para devolverle la traición que le puso entre rejas y matarle. Pero lo que él no sabe es que todo está dentro del plan: Don le convence de que si ha entrado, es para escapar junto a él y llevar a cabo el robo definitivo en Europa.
Y es que el Don del 2006 no era realmente un film sobre el villano criminal que da nombre a la película, sino sobre Vijay, el hombre de la calle que debía comenzar a hacerse pasar por él. Esta vez, libres de engaños, sí que seguimos las aventuras del ahora melenudo amo del submundo criminal, en las que se volverá a ver las caras con la traicionada agente Roma de la Interpol, y con un par de viejos conocidos más que tampoco guardan demasiado buen recuerdo del manipulador Don, como el antiguo capo del crimen organizado Vardhan. La trama, por pura necesidad, es mucho más convencional que en la primera parte, pero eso no hace que la película sea en absoluto menos entretenida, entre otras cosas porque sabemos que va a existir el juego de traiciones entre el grupo de ladrones y la policía, al compartir el plan con su enemigo íntimo Vardhan. Además, esta vez en mayor cantidad, disfrutamos de la chulería, muecas y continuas burlas del cínico Don, capaz de ser irónico aún teniendo pistolas apuntando a su cabeza, y que parece tener controlado hasta los cambios más imprevisibles de su plan.
Esta secuela se puede dividir en dos partes: la primera sería la «preparación» del robo, en la que vemos cómo Don reúne un equipo de criminales, entre ellos un sorprendido Vardhan, con el que cometer un gran golpe, un robo imposible; en la segunda parte, vemos la ejecución de ese golpe, y cómo se ponen en marcha los planes personales dentro del equipo para acabar con los demás y quedarse con el premio, un premio, hay que decirlo en esta época en que nuestra economía se va al garete, un tanto devaluado como las placas originales de billetes de 500 euros. A todo esto, hay que añadirle gran cantidad de acción, persecuciones tan estupendamente realizadas como en la primera parte y una dirección de Farhan Akthar, cada vez más consolidado como uno de los mayores talentos del cine Bollywood, por no decir asiático, que sabe sacar partido al presupuesto haciendo un film visualmente muy espectacular, con numerosas localizaciones internacionales. El producto final es entretenimiento de alta calidad, perfecto para abarrotar los cines de Mumbay en navidades.
Podríamos decir que la primera parte, Don, tenía más el estilo de entretenimiento de la saga Bond, y esta segunda, Don 2, sigue el modelo de las aventuras de Tom Cruise en Misión Imposible, truco de la careta -en un cameo espectacular- incluido. Aunque para espectacular el derroche de carisma de Sha Ruhk Khan en la película. “The king is back”, como decía al principio, y es que vuelve a encandilarnos con su interpretación pasada de vueltas, en puro desfase de gestos. Mantiene un buen duelo con Bomal Irani (Vardhaan), que no deja de mirarle con desconfianza, y con razón. La bellísima Priyanka Chopra repite como la gata detrás del ratón. Ella es la agente Roma, en una interpretación modélica, y que esta vez tiene, a falta de romance con Don/Vijay, su propia trama romántica con un compañero de trabajo, por suerte para ella mucho más joven que el veterano Om Puri.
El ritmo quizás se haga un tanto pesado en algunos momentos, a mitad de la primera parte, cuando llega el momento de explicar quién son los personajes que aparecerán al trasladarse la acción a Europa, o con alguna trama a la que se le da demasiado tiempo en pantalla como la de la vida familiar del informático del equipo criminal, pero en general el guión es bueno, con inacabables giros, y la acción de altos vuelos. A nivel técnico el film es espectacular, tanto la fotografía de Jason West, que le saca todo el partido a las numerosas localizaciones, con ese look azulado visualmente impactante, como la música del trio Shankar-Ehsaan-Loy, que mantiene el tema principal de la primera parte y vuelve a hacer un trabajo magnífico. Que no os sorprendan la cantidad de persecuciones y accidentes de coche que hay en el film: la culpa es de Matthias Barsch, del que seguramente habéis visto su trabajo en la serie alemana destrozacoches por excelencia, Alerta Cobra.
En resumidas cuentas, aunque Don 2 es algo inferior a la primera parte, es otro gran espectáculo. Don dice «no solo es difícil atraparme, sino que es imposible». Espero que también sea imposible dejar de tener una tercera parte con nuevas aventuras de nuestro capo criminal favorito.
Lo mejor: Tener de vuelta al jefe criminal más chulo del sudeste asiático.
Lo peor: Algún bajón de ritmo a media película y poco más.
Por nuestro colaborador Víctor Muñoz (El Pozo de Sadako)